A todos nos ha pasado alguna vez, ¿verdad? Una de esas tiradas de dados (o partidas enteras) en las que la Dama Fortuna se pasa las leyes de su prima lesbiana, la Probabilidad, por donde amarga el pepino, y todo sale mal. Curiosamente recordamos menos las veces en las que sale bien, que debe haber las mismas al menos... Pero claro, es más reforzante pensar que cuando ganas, ganas por tu brillante estrategia, y que cuando pierdes, pierdes por la Puta Fortuna.
Pues bien. En la partida de campaña que echamos anoche Metal y yo, la Diosa Fortuna debía querer cobrarme todas las tiradas buenas que he tenido en mi vida, y me hizo pagar con la derrota más ignominiosa que he tenido en mucho tiempo.
Como muestra lo siguiente: 10 Brujas con dos Brazales Hidra, una Súcubo con Brazales Hidra y un Hemónculo asaltan a 7 Bersérkers con un Señor del Caos con Garras Relámpago. Tiré más de 50 dados, y no es una exageración. ¿Sabéis cuántos Bersérkers cayeron?
Uno.
Sí, uno.
Como te lo digo.
Esa fue la tónica durante toda la partida. Recibí mi derrota más horrible a manos de una novata, y de los malditos Marines del Caos.
Ngh.
Hombre, novata y con suerte, pero también hay mérito; si warhammer fuera auto-play no habríamos jugado mucho.
ResponderEliminarHoy yo he disparado 10 cañonazos a 5+ y no he impactado ni uno, en tres salvaciones importantes de 3+ he fallado dos y en general mi suerte ha apestado.
Hombre, claro que hay mérito! Mi despliegue no fue muy inteligente, y seguí usando mal a las Guadañas. Pero la suerte me dio el golpe de gracia...
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