La lista de ejército es el elemento más importante de una partida de warhammer. ¿Cómo la hacéis vosotros?
Yo recuerdo que en mi juventud las hacía con ordenador, e incluso llegué a usar un programa de éstos chupiguays con presentación bonita. Pero con el tiempo empecé a ser más pragmático y ahora las hago tranquilamente a boli, en casa si tengo tiempo o en el metro si ando liado. Parecen una auténtica chapuza, pero a mí me valen.
Además, al hacer una lista primero pienso un rato en dos cosas: qué tipo de comandante quiero y qué núcelo de tropas voy a llevar. A partir de ahí, intento cubrir las carencias de lo básico y explotar las debilidades del enemigo. Así, si llevo un comandante guerrero, pondré un par de magos para equlibrar la balanza; si tengo dos o tres unidades centrales de infantería, necesitaré artillería y movilidad. Si me enfrento a elfos, fuerza 4. Si me enfrento a Imperio, mucha tropa y unidades rápidas. Si me enfrento a Caos, muchas unidades de tamaño medio. Si me enfrento a Skaven, unidades de élite y pantallas de tropas prescindibles.
Si quieres ganar a warhammer, apréndete esto: conoce a tu enemigo. Siempre. Échale un vistazo al libro de ejército enemigo y piensa qué va a llevar tu oponente. Si no, te juntarás con un montón de tropas inservibles o sin defensa mágica. ¿Sucio? Puede. Pero me gusta el juego sucio.
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